viernes, 16 de enero de 2009

El resbalón de Soraya

Ya de viernes y por la tarde, el cuerpo me pide un poco de relax y algo de mala leche. Así que voy a comentar la foto estrella de hoy, comentario obligado en radios y televisiones nacionales: la de Soraya la descalza, Soraya Sáinz de Santamaría Antón, jefa parlamentaria del Partido Popular en el Congreso español.

Después de haber criticado -con razón- el pase de modelos que las ministras socialistas dieron en su día en la revista Vogue, ahora va la niña portavoz y se deja fotografiar caída de culo para el magazine del EL MUNDO. En blanco y negro (que es más encantador) y sin zapatos. Ríete de Remedios Amaya en Eurovisión (Spain, 0 points).

La pose tiene tela y no sabemos si el fotógrafo (Luis Malibrán) la pilló de la vuelta al hotel la pasada Nochevieja o si ambos perpetraron la escena en plan Cenicienta fregona a la espera de su príncipe azul (pero azul génova) con el zapato de cristal.

Al parecer la foto pertenece a una entrevista en la que, según amenaza EL MUNDO, ella "descubre su lado más personal". ¡A los refugios! A mi, la verdad, las intimidades de Sorayita me importan un pimiento, sobre todo con la que tenemos encima (3 millones de parados y subiendo). No me interesa saber si le gustan los huevos fritos con puntilla o el enano volador de Morón. Si utiliza suavizante en la ropa interior o, peor aún, si usa (o no) ropa interior.

Lo que sí me queda claro es que con estas chorradas las mujeres hacen un flaco favor a su causa. Se llamen Soraya o Teresa Fernández de la Vega. Porque mucho pedir igualdad y tal y cual, que se las respete y que se las juzgue por sus hechos y luego ven una cámara y la vanidad les pierde. Da igual que sean abogadas del Estado (¡como si el Estado necesitara abogados!) o conductoras de autobús. Todo por una popularidad de papel couché que no alimenta ni da votos.

Lo más atractivo de una mujer normal (y por normal entiendo que tenga dos brazos y dos piernas y dos de todo, menos lengua, que basta una) lo más interesante, digo, es su inteligencia. Eso no se marchita, no caduca, no cansa. Si encima es guapa y tiene dinero y un ojo verde y otro azul, entonces -y sólo entonces- merece la pena, lo aconseje Warren Sánchez con música de Les Luthiers, merece la pena, digo, dejarlo todo: el tabaco, el alcohol y hasta el abono de San Isidro el que lo tenga.

Así que ahí va mi juicio a tu resbalón: María Soraya has metido la pata (descalza, eso sí, que es más ecológico). Y si tu vida política ya era complicada porque Mariano-naniano te sacó de la cuasi-nada para liderar las huestes centristas, ahora va a ser imposible. Cuando tus compañeros (y compañeras, sobre todo ellas) hablen de tí en privado se reirán de tu mirada de corderico lechal y afilarán el cuchillo para clavártelo y, después, dorarte a la estaca como si fueras de Aranda de Duero y no de Valladolid, añada de 1971.

Querer ser a la vez Chica Almodóvar y señora del barrio de Salamanca tiene estas servidumbres. Y si no, pincha aquí y escucha las declaraciones de PJ Ramírez explicando el "suceso". Después de "cargarse" al presidente del Real Madrid, quizá el director de El Mundo sea finalmente un submarino... de sí mismo.

PD: de regalo y por el mismo precio, cuelgo el vídeo que el Grupo Risa le dedicó a la Ilma. Sra. Diputada cuando se supo -para sorpresa de todos- que ella iba a ser la mano derecha de Rajoy.

1 comentario:

BILEHC dijo...

Hombre, pues a mi me ha parecido lo más interesante que ha hecho en mucho tiempo...incluso parece que tiene un tantarantán, no se si me entiende...jejejeje.


Un abrazo desde el Bierzo,Don Ignacio.